Esta startup está construyendo la instalación de producción de baterías más grande del mundo; incluso superará en producción a las Gigafábricas de Tesla.

La startup de energía Rondo busca cambiar el juego de la calefacción industrial, gracias a un ladrillo especial hecho a partir de una receta centenaria, como informó Canary Media.

Aunque el método aún no se ha probado a gran escala, si Rondo lo logra, podría tener un impacto masivo en el futuro del planeta.

Rondo utiliza ladrillos refractarios, hechos principalmente de oxígeno, silicio y aluminio, y es conocido por su capacidad de almacenamiento de calor, según Canary Media. La empresa calienta los ladrillos en un recipiente aislado utilizando electricidad limpia procedente de fuentes de energía más asequibles. Los ladrillos pueden retener un calor de más de 2.700 grados Fahrenheit y pueden suministrar calor según demanda para reemplazar los métodos de energía sucia utilizados en procesos industriales intensivos.

Rondo, con sede en el Área de la Bahía, produce los ladrillos en una instalación en Tailandia propiedad de Siam Cement Group. En los próximos años, esa fábrica experimentará una expansión masiva, aumentando su producción en casi 40 veces su producción actual.

Una vez que la instalación más grande esté en funcionamiento, será la instalación de baterías más grande del mundo en términos de producción, capaz de producir mucha más capacidad de almacenamiento que las fábricas de iones de litio. La fábrica superará fácilmente a las instalaciones actuales administradas por Tesla y GM, según Canary Media.

Rondo puede expandir la producción tan rápidamente porque el mecanismo de almacenamiento no incluye los materiales costosos que incluyen las baterías tradicionales. Por no hablar de la colaboración con SCG, que ya fabrica este tipo de ladrillos.

Se necesitan cantidades increíbles de calor para fabricar muchas cosas, como cemento, acero e incluso comida para bebés. Muchas empresas se han comprometido a reducir la contaminación del aire producida en sus fábricas, pero muchas no saben cómo producir el calor necesario para fabricar sus productos sin quemar carbón o gas.

El director ejecutivo de Rondo, John O'Donnell, cree que el costo de producción más barato y una alternativa confiable a la energía sucia son una obviedad.

O'Donnell dijo a Canary Media: “Cuando ofrece valor económico y descarbonización, entonces hay vientos de cola económicos. Esos son los proyectos en los que nos estamos enfocando”.

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